El aislamiento con relleno soplado utiliza materiales sueltos, como fibra de vidrio o celulosa, que se introducen en paredes, áticos u otras cavidades mediante equipos especializados. Esta técnica mejora la eficiencia térmica al llenar huecos y áreas de difícil acceso, proporcionando una solución no invasiva para mejorar el rendimiento energético.
El aislamiento llena cada hueco, asegurando una cobertura completa, lo que ayuda a mejorar la eficiencia energética y elimina las corrientes de aire.
Al minimizar la pérdida de calor, este método reduce la necesidad de calefacción o refrigeración adicional, lo que conduce a facturas de servicios más bajas.
Un aislamiento adecuado ayuda a mantener una temperatura interior estable, proporcionando mayor confort durante todo el año al eliminar los puntos fríos y las corrientes de aire.
El aislamiento suelto se sopla en cavidades de paredes, pisos o áticos, llenando de manera uniforme todos los huecos y espacios.
Después de la aplicación, el área se sella y se inspecciona para asegurar un rendimiento óptimo y una cobertura total.
El aislamiento con relleno soplado es una solución altamente efectiva para mejorar la eficiencia energética, reducir el ruido y aumentar el confort interior en edificios nuevos y existentes.
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