Sellado de aire
Sellado de aire
El sellado de aire es el proceso de cerrar grietas y huecos en los edificios para evitar fugas de aire no controladas, lo que mejora la eficiencia energética y el confort interior. Al garantizar un envolvente del edificio herméticamente sellado, el sellado de aire trabaja en conjunto con el aislamiento para mejorar el rendimiento general del hogar o edificio.
Lugares de Aplicación
- Hogares Residenciales
- Edificios Comerciales
- Áticos, sótanos, alrededor de puertas, ventanas y conductos de aire
Ventajas
- Mejora el rendimiento del aislamiento El sellado de aire reduce las corrientes de aire y las fugas, asegurando que el aislamiento funcione de manera más efectiva.
- Previene problemas de humedad Sellar grietas ayuda a prevenir la infiltración de humedad, que puede llevar al crecimiento de moho y daños estructurales, manteniendo la integridad del aislamiento.
- Reduce la pérdida de energía Al sellar las fugas de aire, se minimiza la pérdida de calor a través de paredes, pisos y techos, ayudando al aislamiento a mantener temperaturas interiores consistentes.
Beneficios/Resultados después de la Aplicación
Al sellar las fugas de aire, el aislamiento funciona al máximo de su capacidad, reduciendo la pérdida de energía y disminuyendo las facturas de servicios.
Un sellado de aire adecuado ayuda a mantener la humedad fuera, previniendo el crecimiento de moho y protegiendo el aislamiento de daños causados por la humedad.
Sellar grietas y huecos junto con el aislamiento asegura que las temperaturas interiores permanezcan estables, reduciendo corrientes de aire y mejorando el confort en los espacios habitables.
Proceso de Aplicación
Identificación de grietas y huecos
Se realiza una inspección exhaustiva para localizar áreas de fuga de aire alrededor de ventanas, puertas, áticos y otros puntos vulnerables.
Sellado con materiales apropiados
Se utilizan masilla, espuma en spray y burletes para cerrar grietas y huecos en el envolvente del edificio.
Inspección Final
Se inspecciona el área para asegurar que todas las fugas de aire hayan sido selladas correctamente, optimizando el rendimiento del aislamiento.